Numerosos detalles técnicos fueron desarrollados especialmente para él: el Porsche 963. Y así, este jugador superior de la próxima temporada LMDh es como un dedo que apunta desde el futuro. El director de Motorsport Thomas Laudenbach explica el nuevo fenómeno de resistencia de Weissach.
Con el programa LMDh, Porsche regresa a la liga superior de estos campeonatos para luchar nuevamente por las victorias generales. El espectacular auto de carrera con una potencia del sistema de alrededor de 500 kW (680 PS) hará su debut en las 24 Horas de Daytona en enero de 2023.
El hecho de que sea posible que Porsche participe en la serie IMSA y el WEC con el mismo auto se debe a un acuerdo anterior. El 24 de enero de 2020, tres asociaciones anunciaron un nuevo conjunto de reglas: el organizador de Le Mans, el Automobile Club de l’Ouest (ACO), la Fédération Internationale de l’Automobile (FIA) y la Asociación Internacional de Deportes de Motor de los Estados Unidos (IMSA).
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La normativa LMDh no restringe la cilindrada, el diseño o el número de cilindros del motor de combustión interna. Laudenbach y sus ingenieros eligieron un motor antiguo y familiar como base para el regreso de Porsche a la clase superior. En sus inicios en Porsche, entre 1998 y 2013, Laudenbach fue responsable de la conducción del coche de carreras LMP2 RS Spyder, que sirvió de base para su uso en el 918 Spyder. “Motorsport ya está en los genes de su cilindro V8. La posición baja del cigüeñal, en particular, te permite optimizar el centro de gravedad del auto de carreras”, dice con entusiasmo. “La lubricación por cárter seco ya estaba diseñada para una alta aceleración lateral en el 918. Si considera el grado de libertad en las regulaciones, por ejemplo, cuando se trata de peso mínimo y rendimiento, este 4.