La película captura la gama F-PACE, incluido el modelo SVR supercargado 550PS, V8, y su amplitud de lujo y rendimiento. El F-PACE SVR mostró su capacidad dinámica, cortesía de su chasis especialmente ajustado, en las curvas retorcidas de Velefique, en el sur de España. El potente SVR acelera de 0-100 km / h en 4,3 segundos (0-60 mph en 4,1 segundos).
Jaguar trabajó con Canon para construir el último vehículo con cámara para la sesión. La tripulación preparó un F-PACE con un brazo ruso muy avanzado, una grúa de cámara con control remoto, equipado con la nueva cámara EOS de Canon. El vehículo se cubrió con una envoltura de cuerpo negro mate útil para minimizar los reflejos en los vehículos sujetos durante la filmación.